miércoles, 24 de diciembre de 2014

NUESTRA ESPERANZA DEL CIELO








PALABRAS DE LA VIRGEN A LOS VIDENTES DE FATIMA

-VENGO A DECIR AL MUNDO 
QUE NO PEQUEN MAS-

---   Es preciso que se en enmienden, que pidan perdón de sus pecados.
---   Que no ofenda más a Nuestro Señor, que ya está muy ofendido.
---   Quiero decirte que Soy Nuestra Señora del Rosario; que continúes      rezando el rosario todos los días.
- -   Rezar, rezar mucho, y haced muchos sacrificios por los pecadores,     pues van muchas almas al infierno, por no haber quien se                     sacrifique y pida por ellas.
     Habéis visto el infierno, a donde van las almas de los pobres               pecadores; para salvarlos, quiere Dios establecer en el mundo la         devoción a mi Inmaculado Corazón  


El Segundo Secreto de Fátima

   La horrorosa visión del infierno que tuvieron los niños el 13 de Julio constituye el Segundo  Secreto de Fátima.   La Virgen santísima dijo Luego a Lucia:
“Habéis visto el infierno, donde van las almas de los pobres pecadores.  Para salvarlas. Dios quiere establecer en el mundo la devoción a mi Corazón Inmaculado. Si se hace lo que yo os diré, muchas almas se salvaran y se tendrá la paz. La guerra terminara; pero si no se cesa de ofender a Dios, bajo el reinado de Pio XI comenzara otra peor.

  Cuando veáis una noche iluminada por una luz desconocida, sabed que es la gran señal que Dios os da de que va a castigar el mundo de sus crímenes por la guerra, el hambre y las persecuciones contra la Iglesia y las persecuciones contra la Iglesia y contra el Santo Padre.
 Para impedir esto vendré a pedir la consagración de Rusia a mi Corazón Inmaculado y la comunión de los primeros sábados del mes.

  Si se escuchan mis peticiones, Rusia se convertirá y se tendrá la paz. Si no, ella (Rusia) propagara sus errores por el mundo, provocando guerras y persecuciones contra la Iglesia. Los buenos serán martirizados, el Santo Padre tendrá mucho que sufrir; varias naciones serán aniquiladas.

(En este lugar sigue el Tercer Secreto, ver capitulo IV/C/2)

  Pero finalmente, mi Corazón Inmaculado triunfara, el Santo Padre me consagra Rusia que se convertirá, y un tiempo de paz será dado al mundo. En Portugal se conservara siempre el dogma de fe, etc. (sic). No digas esto a nadie; a Francisco podéis decírselo”